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Ed. Acantilado, año 2007. Tamaño 21,5 x 13,5 cm. Traducción de Roberto Bravo de la Varga. Estado: Usado excelente. Cantidad de páginas: 280
Escritor austríaco, Stefan Zweig fue muy conocido en las primeras décadas del siglo XX gracias a sus relatos, novelas, ensayos y semblanzas biográficas.
De origen judío, Zweig nació en una familia acomodada y estudió Filosofía en la Universidad de Viena, interesándose desde entonces en la literatura, tanto desde un punto de vista crítico como creativo. En 1901 publicó su primer poemario y desde entonces mantuvo una intensa actividad en diversos campos y géneros, pasando del ensayo a la novela o el teatro con facilidad.
Zweig destacó también por sus firmes posiciones éticas en contra de la guerra, que le llevaron al exilio en Suiza durante la I Guerra Mundial, donde se estableció como corresponsal. Durante varios años, Zweig se dedicó a escribir y a viajar, pasando por Alemania y la Unión Soviética, trabando amistad con numerosos intelectuales de la época.
Tras el auge del nacional socialismo en Austria y Alemania, Zweig decidió establecerse en Londres, ya que su origen judío y sus posiciones pacifistas le situaron en una incómoda posición, siendo su obra prohibida por el régimen nazi. Zweig vivió también en París y viajó por América Latina dando una serie de conferencias.
En 1942, convencido de que la Alemania nazi iba a ganar la guerra y someter al mundo a sus ideales, Zweig se suicidó junto a su segunda esposa. Poco después, en 1944, aparecería su autobiografía, El mundo de ayer.
La obra de Zweig, pese a su éxito en la época, cayó progresivamente en el olvido durante la mayor parte del siglo XX, hasta su recuperación décadas después, siendo obra de estudio por críticos y académicos. De hecho, sus relatos han formado parte de obras tan actuales como la película El gran hotel Budapest, dirigida en 2014 por Wes Anderson.
El presente volumen está integrado por seis relatos:
Obligación impuesta nos cuenta la historia de Ferdinand y Paula, una pareja que lucha con todas sus fuerzas por huir de la guerra, del ejército y, en definitiva, del peso del Estado. Pero cada uno lo hace a su manera: ella está dispuesta a hacer lo que sea por tener a Ferdinand a su lado, siempre, por conservar la paz, la tranquilidad y, sobre todo, la felicidad. Por el contrario, dos fuerzas contrarias no paran de luchar en la mente de Ferdinand: el individualismo contra el colectivismo, las masas contra las libertades de cada ser humano, la objeción de conciencia contra la burocracia de las instituciones…De pronto lo llaman a filas para que luche en la primera Guerra Mundial. Para Ferdinand, artista, pintor, no tiene sentido luchar puesto que no se identifica para nada con los ideales que se supone ha de defender, con su vida si es preciso.
La mujer y el paisaje, el relato que da título al libro, es una historia de amor, de pasión, de sentimientos inexplicables e incontrolables. Es el encuentro entre un hombre y una mujer, dos desconocidos que se dejan arrastrar por la fuerza de la Naturaleza sin entender nada, porque lo único que importa es sentir. Sin preguntas, sin respuestas, sólo sentir.
Declive de un corazón relata la historia de un padre que descubre que su hija no es cómo él pensaba. Y que se da cuenta de que ha dedicado toda su vida a trabajar, a prosperar, a mejorar la posición social de su familia sin preocuparse por conocer a su mujer y a su hija, por sus deseos, sus sueños, sus anhelos y, sobre todo, por saber quién las acompañaba, quién lo sustituía a él mientras estaba fuera de casa, lejos de la ciudad, trabajando.
En Resistencia de la realidad dos amantes que pertenecen a dos clases sociales diferentes, y se ven obligados a separarse después de haber compartido la vida durante dos. Sin embargo, a pesar de que tanto él como ella han rehecho su vida, los dos no pueden olvidar y no pueden evitar volver continuamente a esos dos años, a sus fantasmas, a sus recuerdos, y se dedican a desvelar y a vivir su presente a través de su pasado.
Descubrimiento inesperado de un oficio cuenta la historia de un hombre que, con todo el día libre en París, decide seguir por las calles a alguien del que sospecha que es un detective privado. Sin embargo, tanto el hombre como el propio lector se verá sorprendido, desbordado y asaltado una y otra vez por los giros inesperados de esta historia y por el oficio al que se dedica este supuesto detective privado.
Por último, en Wondrak conocemos a Ruzena Sedlak, a quien todos llaman la Calavera, una mujer que nació con una deformidad, sin nariz, y que por el rechazo, los insultos, el miedo y el asco que provoca entre sus vecinos se ve obligada a vivir alejada de todo y de todos, en una casa en el bosque. Ella es feliz así, no quiere saber nada de nadie, hasta que nace su hijo y todo cambia para ella. Entonces estará dispuesta a todo, cueste lo que cueste, con tal de conservarlo a su lado y peleará hasta el final para que nadie, ni la Iglesia, ni la educación, ni el Estado ni, sobre todo, el Ejército, lo aparten de ella.