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Ed. Península, año 1974. Tamaño 19 x 12 cm. Estado: Usado muy bueno. Cantidad de páginas: 280

Julio Cortázar ante su sociedad, Joaquín Roy020La obra de Julio Cortázar ha sido estudiada exhaustivamente por multitud de reseñas, artículos, estudios monográficos, entrevistas y tesis académicas. La tardía fama del autor ha provocado la aglomeración de críticas en los últimos volúmenes de publicaciones literarias. Salvo menciones esporádicas, las obras de Cortázar han sido analizadas a través de tres prismas predominantes: la literatura fantástica, la teoría literaria y la búsqueda del destino del hombre.

Aspecto ignoto resulta su preocupación por la Argentina y la ciudad que habitó durante años: Buenos Aires. Aisladas afirmaciones de la crítica señalan las dimensiones argentinas y porteñas de los personajes creados por el autor. En ningún momento, sin embargo, se apunta qué provoca la identificación, cómo se comportan los personajes al evidenciar sus características argentinas, cuál es en suma su potencial argentinidad. La tarea es ardua, y resulta muchas veces casi imposible responder a esta simple pregunta: ¿qué es la argentinidad? El intento puede comenzar en un contexto más amplio: ¿qué es un pueblo?

Una nación, pueblo determinado, hecho irrevocable de la Historia, es un producto humano. Como todo resultado de la actividad del hombre, una nación es un ser completo, con vida propia. Como el individuo, desde el nacimiento rompe amarras y se encierra en su propia existencia. Para penetrar en ese conjunto de secretos cotidianos es necesario usar armas que no son ofrecidas por las ciencias que estudian la complejidad humana con métodos empíricos.

Para descubrir cuál es la oculta esencia de un pueblo, se debe distinguir entre los hechos históricos y la existencia cotidiana de la gente que deambula por los confines de la nación. Señalaba Unamuno en forma definitiva la diferencia: la Historia nos relata las vicisitudes de la nación exterior, sus revoluciones, guerras, éxitos económicos, sucesión de dinastías y presidentes. La intrahistoria refleja la vida cotidiana del pueblo que forma esa nación, sus diarias preocupaciones, sus eternos problemas.

Resulta peligrosa la contemplación de fenómenos folclóricos —si se entrampa en la superficie de danzas y atuendos—, ya que devienen mera capa que oculta la honda problemática. Es también erróneo el camino dialectológico —si se reduce a la simple descripción—, ya que no pueden descubrirse hondos problemas en lo que no es sino simple variante verbal.

Tiene que rechazarse por completo el costumbrismo o el indigenismo a ultranza, que en muchas ocasiones estaban guiados por el ansia de descubrimiento de solamente una faz de la problemática de una nación determinada. Se olvidaba que la marcha histórica había incrustado otros elementos igualmente eficaces en la formación del carácter nacional.

Difícilmente es posible encontrar la médula de un pueblo en un estudio de capas sociológicas, ya que acarrea el riesgo de caracterizar a los individuos por su nivel económico y acentuar sus diferencias: la intrahistoria debe poder aplicarse a todos los sectores de la sociedad, sin distinción.

Por último, algunas veces puede llegar a conseguirse la síntesis de la esencia nacional en las sátiras sociales, con una salvedad: si la crítica se reduce a un sector y el acusador se queda al margen, el tratamiento se reduce a mero documento.

En ninguna de las anteriores categorías puede encajarse la obra de Cortázar en su conexión con la problemática argentina. La total ausencia de temas folclóricos y su negativa a tratarlos son constantes en las obras. Los hechos históricos son casi inexistentes, al igual que la sátira tradicional.

Resulta rotunda la propia negativa del autor: «Jamás me he considerado un escritor autóctono. Con Borges y algunos otros, parecemos haber entendido que la mejor manera de ser argentino es no andarlo diciendo tanto, a diferencia de lo que hacen estentóreamente los escritores ‘autóctonos'». Para nuestro autor, por lo tanto, la verdadera literatura nacional no podrá demostrarse cuando se parte de la base de afirmarla antes de producir las obras. El escritor que intenta una obra literaria y ata su creación a una idea determinada —su país— difícilmente logrará plasmar la palpitación de su tierra, que saldría más fluida, más libre, si no se sintiera preocupada a priori. Dice el propio Cortázar: «No comprendo por qué un escritor argentino ha de tener como tema a la Argentina».

No puede estar en el tema el entronque de una obra con una cultura determinada. Tiene que ser algo más hondo, menos programado. La esencia de una nación cualquiera tiene que encontrarse en sus pulsaciones, algo que no se puede medir empíricamente: es imposible construirlo de salida, antes de engendrar la obra literaria. El aliento de la obra será entonces lo que probará o negará el arraigo de un autor en su tierra; nunca lo conseguirá por el continuo nombrar de su país y sus temas definidos.

La problemática nacional está enterrada, por lo tanto, en la textura de las obras, nunca en la simple superficie. ¿Dónde se refugia la intrahistoria de un pueblo? Resulta evidente: en la poesía de la narración ingenua. No obstante, la pregunta suprema sigue en pie: ¿cómo es un pueblo? Más concretamente: ¿cómo es el pueblo argentino?. En el género que tal vez haya sido el más prolífico de la historia literaria hispanoamericana se debe buscar la respuesta: el ensayo, en sus muchas facetas.

INDICE
Abreviaturas empleadas
I- Introducción
1- Argentina como preocupación
2- Desarraigo
3- Soledad
4- Escapismo
5- Amistad
6- El autor, sus intenciones y su país
II- Primera época y período fantástico
1- Comienzos anónimos (Presencia)
2- Incomunicación (Los reyes)
3- Monstruos solitarios (Bestiario)
III- Hacia el hombre
1- 1951: Exilio
2- Bondad humana (Historias de cronopios y de famas)
3- Evocación argentina (Final del juego)
4- Con el hombre (Las armas secretas)
IV- Preludio de una odisea (Los premios)
1- Introducción al viaje
2- Aislamiento: raíz y matices
3- Persio y el mundo argentino
4- Medrano y Presutti: fracaso y esperanza
V- Argentina errante (Rayuela)
1- Entre América y Europa
2- Soledad en París
3- Encierro en Buenos Aires
4- El lector y el doble
5- El culto de la amistad: Horacio y Traveler
VI- Cortázar en síntesis y hacia el futuro
1- Resumen cuentístico (Todos los fuegos el fuego)
2- El arsenal del autor (La vuelta, Ultimo round)
3- La ciudad en Europa (62 Modelo para armar)
4- Recuerdo de Buenos Aires (Buenos Aires, Buenos Aires)
Conclusión ante Libro de Manuel
Bibliografía
-Obras de Julio Cortázar
-Bibliografía seleccionada sobre Julio Cortázar