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Ed. Losada, año 2012. Tamaño 19 x 12 cm. Prólogo de Daniel Freidemberg. Estado: Usado excelente. Cantidad de páginas: 264
Balbuceante, trémula, fluida, siempre como deshaciéndose en el momento mismo en que se la quiere tocar, la poesía de Ortiz
es tan profundamente placentera como ardua de abordar, mucho más en los últimos libros que en los primeros, pero algo de esa
dificultad está presente ya en la aparente sencillez de los poemas juveniles. No porque en Ortiz pueda hallarse hostilidad alguna hacia el lector, sino porque aquello que dice es siempre de algún modo inaferrable, impone al lector una extrañeza que hace de la lectura una tarea intensa y exigente, o, mejor aún, lo que reclama es un tipo de entrega para la cual los lectores actuales no suelen estar preparados, un despojamiento.
Pero si el lector entra en ese juego, si acepta realmente hacerse cargo de la aventura estética que Ortiz le propone, si se deja estar en ese fluir semejante a un encantamiento (pero un encantamiento lúcido, con la mente y todos los sentidos alertas), puede, de pronto, descubrir que ha ganado mucho, sobre todo cuando, al retornar a su realidad, la encuentre sorprendente y delicada, o al menos capaz de serlo por un rato. Habrá encontrado una disciplina de la paz y la atención, que inevitablemente ha de ser provisoria, pero los instantes que habrá vivido mientras respiró esta atmósfera le resultarán seguramente imborrables.
Daniel Ftreidemberg
Indice
Prólogo, por Daniel Freidemberg
EL AGUA Y LA NOCHE (1924-1932)
Domingo
Señor
Pesada luz
Día gris
Los ángeles bailan entre la hierba
Delicias últimas
«Diana»
EL ALBA SUBE (1933-1937)
Sí, las rosas
Es otoño, muchachos
Oh, pueblo azul y quieto
Los ángeles bajan en el anochecer
Ráfaga del vacío
Estos hombres
EL ÁNGEL INCLINADO (1937)
Fui al río…
La ribera
Luciérnagas…
Un palacio de cristal…
LA RAMA HACIA EL ESTE (1940)
En la noche un ruido de agua…
Cielos de Abril…
No es tu luz, Octubre…
Para que los hombres…
Sí, el nocturno en pleno día
EL ÁLAMO Y EL VIENTO (1947)
No era necesario…
Colinas, colinas…
22 de Junio
Yo adoro…
No podemos entrar, Abril…
EL AIRE CONMOVIDO (1949)
No te detengas alma sobre el borde…
He mirado…
A la orilla del río…
Cantemos, cantemos…
LA MANO INFINITA (1951)
A Teresita Fabani
El aguaribay florecido
Las flores de las márgenes del cambio.
El cementerio de Diamante
Ella iba de pana azul…
Villaguay
De qué matiz…
LA BRISA PROFUNDA (1954)
Es cierto que… 1
A Prestes (Mi galgo) 1
El manzano florecido 1
Para qué el vino, amigos míos… ‘
EL ALMA Y LAS COLINAS (1956)
Invierno Qué, decís… Ella…
DE LAS RAÍCES Y DEL CIELO (1958)
junto auna hierba…
Ah, mis amigos, habláis de rimas…
Alma, inclínate…
EL JUNCO Y LA CORRIENTE (1970)
Luna de Pekín
En las gargantas del Yan-Tsé
En el Yan-Tsé
Fue en la lluvia de Husan
«Toda la dulzura del mundo…»
Al Paraná
A Juan José Saer (En su casamiento)
Letra
En el nacimiento de Claudia Silvia Gola
A Hugo Gola (por sus 25 poemas)
LA ORILLA QUE SE ABISMA (1970)
El río
El Jacaranda
Estas «tipas»
Las viborinas
Alma, sobre la linde…
Callad, callad…
Del otro lado…
Suicida en Agosto
Pasó a través de la noche…
Grillo en Marzo
La muchachita…
Preguntas a la melancolía
Sabéis, amigos…
Me has sorprendido…
Preguntas al cielo
Amiga…