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Ed. Fondo de Cultura Económica, año 1993. Tamaño 23,5 x 16 cm. Estado: Usado excelente. Cantidad de páginas: 394

Las grandes tendencias de la mística judíaPor Gershom Scholem
Jerusalén, Universidad Hebrea, mayo de 1941

Nada podía haber sido más grato para mí que recibir una invitación para actuar como profesor conferenciante en el Jewish Institute of Religion de Nueva York, en el ciclo de conferencias que, bajo el nombre de Stroock, tuvieron lugar en el año 1938. De las nueve conferencias que tiene este libro, en las cuales intenté resumir algunos de los resultados más importantes de mis investigaciones, siete fueron pronunciadas allí, seis en inglés y una -la quinta- en hebreo. Las dos restantes -la segunda y la tercera- que tratan de dos importantes aspectos adicionales de la evolución del misticismo judío (y que no pudieron ser incluidas en el programa original) fueron pronunciadas en otras ocasiones.

Todas las conferencias incluidas en este volumen son versiones considerablemente ampliadas, con excepción de la última, que aparece impresa casi en su forma original. Para ampliar el breve análisis del hasidismo que aparece aquí con un estudio más profundo de sus fenómenos específicos, sería necesario escribir otro libro. Por lo tanto, me he contentado con exponer de un modo más general mis ideas sobre el tema. Teniendo esto en cuenta, se puede decir que el propósito de este libro no es ofrecer un análisis histórico completo del misticismo judío, sino presentar un esbozo de sus principales características, bajo la forma de un análisis de algunas de sus etapas más importantes. Una historia crítica completa del misticismo judío, con una referencia especial a las diferentes corrientes y contracorrientes de la Cábala, requeriría varios volúmenes.

Puesto que estas conferencias no estaban destinadas exclusivamente a los investigadores que trabajan en este campo, sino al círculo mucho más amplio de quienes se interesan por la historia y la religión judías, hice mayor hincapié en el análisis y en la interpretación del pensamiento místico que en las relaciones históricas entre los diversos sistemas. Cuando fue posible hacerlo sin introducir demasiados detalles filológicos, esbocé las relaciones históricas, al menos en líneas generales. Solamente en la conferencia sobre el libro del Zóhar y su autor me aparté de esta forma e intenté hacer un análisis filológico más profundo. Consideré que era mi obligación hacerlo, tanto en vista de la importancia (por todos reconocida) que tiene el tema para la historia del judaísmo, como por el lamentable estado de las investigaciones hasta la fecha. Los lectores que no se interesen demasiado por estos problemas de crítica literaria e histórica se perderán muy poco si se saltan la Quinta Conferencia. Por razones similares he puesto las notas al final del libro, con objeto de no cargar demasiado el texto con referencias que tienen poco sentido para quienes se hallan fuera del círculo de estudiosos de temas judíos o no están familiarizados con la lectura de textos hebreos.

En algunas de sus tesis más importantes, este libro pone en tela de juicio muchas nociones acerca de la historia y la religión judías aceptadas casi sin excepción tanto por judíos como por no judíos. Si se quiere llevar a cabo con éxito la gran tarea que tienen ante sí los eruditos en temas judíos de nuestra generación -la tarea de reescribir la historia judía con una comprensión más
profunda de la interacción de las fuerzas religiosas, políticas y sociales- será necesaria una nueva y urgente dilucidación de la función que desempeñó el misticismo judío en diversos períodos, de sus ideales y de su modo de abordar los diferentes problemas que surgieron a partir de las condiciones imperantes en esas épocas. Me he esforzado por presentar mis opiniones sobre el tema de
la manera más clara y concisa posible, con la esperanza de ofrecer una seria contribución a este debate; tan importante como necesario. Entre los autores que escriben en hebreo, esta discusión lleva ya varios años; en los libros sobre el tema escritos en iqg1és, el debate ha recomenzado con el libro A Religious and Social History of the Jews de Salo Baron, cuya publicación coincidió con la pronunciación de estas conferencias. En lo que a mí respecta, creo sinceramente que ese debate sobre nuestro pasado tiene algo que ver con nuestro futuro.

El propósito de estas conferencias es describir y analizar algunas de las principales tendencias del misticismo judío. Como es natural, en tan pocas horas me será imposible tratar en profundidad un tema tan vasto y complejo, tan extenso e intrincado como el de las corrientes místicas, en su evolución a través de los movimientos conocidos en la historia de la religión judía con los nombres de Cábala y hasidismo. Probablemente todos ustedes habrán oído hablar alguna vez de estos aspectos de la religión judía. Su significado ha sido objeto de muchas discusiones entre los eruditos judíos. Las opiniones al respecto han variado con frecuencia; han fluctuado entre los extremos de la crítica hostil y la condena, por un dado, y el elogio y la defensa entusiastas, por el otro. Pero no han contribuido a aumentar nuestro conocimiento de lo que podría considerarse como la verdadera naturaleza de la tradición mística. Tampoco nos han permitido elaborar un juicio objetivo acerca del papel que ha desempeñado y continúa desempeñando esta tradición en la historia judía, o de su importancia para comprender realmente el judaísmo.

Es preciso agregar que las diferentes interpretaciones del misticismo judío, o al menos de los aspectos que hasta ahora se han discutido públicamente, están llenas de malentendidos y, por consiguiente, de tergiversaciones del tema en cuestión. Los grandes eruditos judíos del siglo pasado, cuya concepción de la historia judía sigue siendo válida en la actualidad, hombres como Graetz, Zunz, Geiger, Luzzatto y Steinschneider, sentian -por decirlo con discreción- poca simpatía a hacia la Cábala. Además de extraña y desconcertante, ésta representaba todo lo opuesto a lo que ellos pensaban y al enfoque que querían hacer prevalecer en el análisis moderno del judaísmo. La Cábala se erguía sombríamente en su camino, aliada a fuerzas y tendencias cuyo rechazo era motivo de
orgullo para un grupo de judíos que consideraban, según palabras de Steinschneider, que su misión principal era irse de este mundo de una manera decente.

Esto puede explicar las opiniones negativas de estos eruditos respecto a la función del misticismo en la historia judía. Está muy claro que su actitud, lejos de ser la del estudioso puro, era más bien la del combatiente que se enfrenta activamente a un peligroso enemigo todavía lleno de fuerza y vitalidad; este enemigo fue el movimiento hasídico. La enemistad puede hacer mucho. Deberíamos estar agradecidos a esos primeros críticos apasionados de la Cábala que, a pesar de que sus preconcepciones quizá deformaron su juicio y su escala de valores, mantuvieron los ojos abiertos y pudieron ver con gran claridad algunos aspectos importantes. A veces estaban en lo cierto, pero por razones distintas de las que ellos aducían. A decir verdad, lo que más sorprende cuando se leen las obras de estos críticos es la falta de un conocimiento adecuado de las fuentes o de los temas sobre los cuales en muchos casos osaron emitir un juicio.

No honra a los estudiosos del judaísmo el hecho de que las obras de los pocos autores realmente informados sabre el tema jamás hayan sido publicadas, y en algunos casos ni siquiera conservadas, puesto que nadie estaba interesado en ellas. Tampoco hay por qué enorgullecerse de que la mayor parte de las ideas y opiniones que mostraron una comprensión profunda del mundo de la Cábala,
cerrado al racionalismo dominante en el seno del judaísmo del siglo XIX, fuesen expuestas por eruditos cristianos con inclinaciones místicas. Entre éstos podemos mencionar a Arthur Edward Waite, autor inglés contemporáneo, y al alemán Franz Josef Molitor, del siglo pasado. Es una pena que la fina intuición filosófica y el poder de captación de estos estudiosos perdieran su agudeza debido a que carecían de todo sentido crítico respecto a los datos históricos y filológicos en este campo. Por la misma razón fracasaban estrepitosamente cuando tenían que tratar problemas relacionados con los hechos.

El resultado obvio y natural de este antagonismo por parte de los grandes eruditos judíos fue que, dado que las guardianes autorizados descuidaron este terreno, surgieron todo tipo de charlatanes y soñadores que lo trataron como si fuese su propiedad privada. Se hicieron las más fantásticas afirmaciones con veleidades de interpretaciones legítimas de la Cábala, desde los brillantes equívocos y tergiversaciones de Alphonse Louis Constant, que alcanzó la fama con el seudónimo de Eliphas Levi, hasta los muy pintorescos disparates de Aleister Crowley y sus seguidores. Ha llegado el momento de recuperar este terreno abandonado y de aplicarle los criterios rigurosos de la investigación histórica. Esta es la tarea que me he propuesto, y en las conferencias que siguen me gustaría proporcionar una idea de las conclusiones a las que he llegado al tratar de arrojar un poco de luz sobre este oscuro terreno.

De más está decir que lo que voy a exponer aquí no puede ser más que un breve esquema de la estructura básica del pensamiento místico, tal como aparece en algunos clásicos del misticismo judío, las más de las veces de una manera tan oscura que impide a cualquier espíritu moderno comprender su significado. Evidentemente, es imposible hacer un resumen del tema sin tratar, al mismo
tiempo, de interpretar su significado. Es harto peligroso resumir en pocos capítulos un movimiento religioso que abarca muchos siglos. Al intentar explicar una cuestión tan compleja coma la Cábala, el historiador también ha de tomar en cuenta la pregunta de Byron: «Entonces, ¿qui6n habrá de explicar la explicación?».

Por lo demás, la selección y la síntesis constituyen en sí mismas una especie de comentario y, en cierta medida, incluso una valoración del tema. Dicho de otro modo, lo que voy a exponer aquí es una valoración crítica, basada en una perspectiva filosófica eterminada, aplicada al tejido vivo de la historia judía, cuyos principios fundamentales creo que están vivos y siguen vigentes hasta nuestros días.

INDICE
Prólogo a la primera edición
Prólogo a la segunda edición
Sistema de transcripción
Primera conferencia: Características generales del misticismo judío
Segunda conferencia: El misticismo de la Merkabá y el gnosticismo judío
Tercera conferencia: El Hasidismo en la Alemania medieval
Cuarta conferencia: Abraham Abulafia y la doctrina de la Cábala profética
Quinta conferencia: El Zóhar. I- El libro y su autor
Sexta conferencia: El Zóhar. II- La doctrina teosófica del Zóhar
Séptima conferencia: Yitshac Luria y su escuela
Octava conferencia: Shabetaísmo y herejía mística
Novena conferencia: El Hasidismo, la última etapa
Notas
Bibliografía