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Ed. Eudeba, año 1963. Tamaño 18 x 11 cm. Traducción de Natividad Massanes. Estado: Usado excelente. Cantidad de páginas: 142
En primer lugar, nos hemos encerrado en un marco geográfico: el de la Europa cristiana. Renunciando al mercader bizantino o al mercader musulmán, evitamos hablar de gentes mal conocidas, de tipos que pertenecen a civilizaciones diferentes, si no hostiles. Pero el comercio, aunque suscita conflictos, es también uno de los principales vínculos entre las zonas geográficas, entre las civilizaciones y entre los pueblos.
Inclusive en la época de las Cruzadas no cesó el intercambio comercial –base de otros contactos- entre la Cristiandad occidental y el mundo musulmán. Más aún, hasta podría afirmarse que la constitución del Islam, lejos de separar Oriente de Occidente, fusionó ambos mundos, y que sus grandes centros urbanos de consumo crearon la demanda de productos que determinó la renovación comercial del Occidente bárbaro.
Tampoco vamos a estudiar por sí mismo el comercio propiamente dicho –mercados, rutas, elementos de trabajo, productos, evolución. Aquí lo que nos interesa son los hombres que se dedicaron a él. A ese respecto, el mercader cristiano, aunque de actividad profesional forzosamente parecida a la de sus colegas orientales, se halla inmerso en un contexto político, religioso y cultural muy diferente.
Y lo que nos interesa es, especialmente, ubicado en el marco de su ciudad, de su estado, de su sociedad y civilización. Nuestra atención se ha dirigido, en particular, a lo que hizo fuera del campo económico con su riqueza y su poder. En especial, vamos a tratar de los mercaderes y de los negotiatores. De los hombres de negocios, de la extensión y complejidad de sus intereses: comercio propiamente dicho, operaciones financieras de todo orden, especulación, inversiones inmobiliarias y rurales.
Para referirnos a ellos nos hemos limitado a citar los dos polos de su actividad: el comercio y la banca. Hemos optado por una exposición sistemática en la cual tomamos al mercader banquero, primero en su gabinete de trabajo o en el mercado; después frente al noble, al obrero, a la ciudad y al Estado; luego en presencia de la Iglesia y su conciencia, y, finalmente, ante la enseñanza, el arte y la civilización.
INDICE
Introducción
I- La actividad profesional
1- La revolución comercial
2- El mercader errante
3- El mercader sedentario
4- Progreso de los métodos en los siglos XIV y XV
II- Función social y política
1- Mercaderes y ciudades
2- Mercaderes y nobleza
3- Mercaderes y clases populares urbanas
4- Mercaderes y campesinos
5- Los mercaderes democráticos
6- Mercaderes y príncipes
7- Las grandes familias burguesas
III- La actitud religiosa y moral
1- La Iglesia contra los mercaderes: la práctica
2- La mentalidad del mercader
3- La religión del mercader
IV- La función cultural
1- Los mercaderes y la laicización de la cultura
2- El mecenazgo mercantil
3- La cultura burguesa
4- Mercaderes y civilización urbana