Ed. Alianza, año 1994. Tamaño 18 x 11 cm. Traducción de Belén Urrutia Domínguez. Nuevo, 148 págs. Precio y stock a confirmar.

Indice:

1- Prefacio.

2- Sociólogos e historiadores, un diálogo de sordos:
I- La diferenciación de la historia y la sociología.
II- El desarrollo de la historia social.
III- La convergencia de la sociología y la historia.

3- Estructuras sociales:
I- El método comparativo.
II- Historia, modelos y tipos.
III- Análisis de encuestas.
IV- Estructura y función.
V- Rol social. VI- Parentesco y familia.
VII- Socialización, desviación y control social.
VIII- Clase social y estratificación social.
IX- Movilidad social.
X- La burocracia.
XI- Patrones, clientes y facciones.
XII- Mentalidad e ideología.

4- El cambio social:
I- El modelo de Spencer.
II- El modelo de Marx.
III- Cuatro monografías en busca de una teoría (en el presente apartado analiza cuatro libros que tratan sobre problemas del cambio social en sociedades concretas y de forma conciente y explícita. Los cuatro se ocupan de la historia de Europa o de europeos fuera de Europa a comienzos del período moderno, ellos son:
El Mediterráneo y el mundo mediterráneo en la época de Felipe II, de Fernand Braudel, la historia del Imperio Otomano de William H. McNeill, Los campesinos del Languedoc, de Emmanuel Le Roy Ladurie y Los vencidos, los indios del Perú frente a la conquista española, de Nathan Wachtel.

En el primero, el interés central de Braudel es la naturaleza del tiempo. Braudel sugiere que los cambios tienen lugar a distintas velocidades y que conviene distinguir tres de estas velocidades en particular. Está el tiempo que transcurre rápidamente de los acontecimientos, el tema de la historia narrativa tradicional (Historia Cronológica); el tiempo de los sistemas económicos, estados, sociedades y civilizaciones, con sus ritmos lentos pero perceptibles (Historia Conjetural); y finalmente la historia del hombre en relación a su entorno, una historia cuyo paso es casi imperceptible, una historia de repetición constante, de ciclos recurrentes (Historia Estructural).

El tema principal de McNeill es la relación cambiante entre el centro y la periferia del Imperio Otomano y en este marco construye su modelo de cambio social. Su tesis es que el centro podía sostener un poder militar organizado a gran escala durante un periodo de tiempo prolongado sólo con la rapiña de las comunidades periféricas, al mismo tiempo que mantenía una base segura. Esto significaba que el Imperio estaba obligado a la conquista continua. El modelo de McNeill podría describirse como un modelo autodestructivo de cambio social. En cierto sentido, este modelo está implícito en todas las concepciones cíclicas de la historia , desde Polibio a Toynbee. Sin embargo en este libro se explicita una descripción clara de la dinámica del cambio. Cada fase se origina en la anterior. Posiblemente, este modelo centro-periferia facilita el análisis de los ciclos de vida de otros imperios.

Por su parte, Le Roy Ladurie –el principal discípulo de Braudel- parte de un enfoque ligado a la ecohistoria puesto que su análisis se centra en la historia de grupos sociales en relación a su entorno. En su modelo, que debe algo a Malthus y a Ricardo, y a la antropología social contemporánea, es sobre todo el cambio demográfico, provocado por factores económicos y culturales –como el de las mentalidades- lo que conduce a los cambios en la estructura social.

El cuarto estudio monográfico examinado, el correspondiente a Wachtel, cuyo análisis se concentra en la conquista española del Perú y trata la crisis provocada por la conquista y el proceso de cambio social en Perú entre 1530 y 1580; es estudiado por Burke a partir de dos de sus conceptos claves. Desestructuración y Aculturación. Por desestructuración se entiende la ruptura de los vínculos que unían a las distintas partes del sistema social tradicional en un todo. Algunas instituciones y costumbres sociales sobrevivieron después de 1530, pero la vieja estructura se desintegró.

¿Cómo reaccionaron los incas ante este proceso de desestructuración?. Wachtel analiza sus respuestas en términos de aculturación, concepto que el define como el contacto de culturas en una situación en la que una sociedad es dominante y la otra subordinada. Algunos indios aceptaron los valores de sus conquistadores, aunque la aceptación aparente algunas veces cubre la persistencia, conciente o inconsciente, de las formas tradicionales de pensamiento. Bibliografía.